Esta es otra de esas recetas básicas, una masa muy esponjosa y ligera. Que sirve para usar con otras preparaciones o comerlo solo.
Ingredientes
4 huevos (200g)
1 yema
130g de harina de repostería
130g de azúcar
20g de mantequilla derretida
Comenzamos colocamos un cazo al fuego, que nos servirá para poner los 4 huevos al baño maria Ponemos los huevos en el bol de la batidora y el azúcar. Revolvemos con varillas enseguida y llevamos al baño maría mezclando siempre hasta que se disuelva el azúcar o alcance la temperatura de 50º.
Llevamos a la batidora hasta que se enfríe, unos 12 minutos y hayamos obtenido el punto letra, pero como yo no se bien cual es el punto letra, me baso más en el tiempo :) En realidad es cuando podemos dibujar con los huevos y el azúcar.
Precalentamos el horno a 175º/180.
Preparamos el molde, enmantemos bien y yo uso papel de horno para garantizar que no se pega.
Paso los huevos que están bien espumosos del bol de la batidora a un bol más grande y con boca más ancha, me resulta más cómodo. Ahora le agregamos la yema de huevo y mezclamos.
Incorporamos la harina en varias tamizando siempre, lo hacemos con espátula para que no se nos licúe la masa. Cuando esté lista le agregamos la mantequilla derretida que esta tibia, pero no lo hacemos a toda la preparación. En el cuenco que hemos derretido la mantequilla ponemos un poco de masa y luego integramos esta a la otra
Seguimos haciendo los movimientos envolventes. La mantequilla mejora la textura del bizcocho y nos ayuda a cortarlo cuando esté frío.
Lo llevamos al horno por 25/30 a 180º. Cuando el palillo sale seco, ya lo tenemos.
Ponemos el molde sobre una rejilla y a los 5 minutos lo sacamos del molde. Cuando esté totalmente frío lo envolvemos con film y lo llevamos a la nevera o lo congelamos hasta el momento de usar.
Caro :)