Estamos en verano, época ideal de disfrutar los batidos, de permitirnos comer montones de helados, de estar mas desordenados con las comidas y comer cosas más ricas, fresquitas.
Esta receta es muy fácil, solo necesitamos helado de vainilla, leche y oreos y claro sirope de chocolate si nos apetece.
Tenemos que tener en cuenta que lleva un montón de helado, si queremos tener un batido en condiciones. Me suena tan raro decirle batido, para mi toda la vida han sido milkshakes.
Ingredientes para un vaso grande
4 bochas de helado de vainilla
4 galletas oreo a las que le quitamos el centro
4 cucharadas de leche fría
1 cucharada de sirope de chocolate
Dividimos las galletas, le quitamos el relleno y procesamos dos tapas que nos servirá para decorar.
En un vaso alto, colocamos una cucharada de sirope de chocolate.
En la licuadora colocamos el helado, las galletas y la leche fria, pulsamos hasta que todo esté homogéneo y tenemos un batido espeso.
Volcamos sobre el vaso, agregamos por arriba la galleta triturada y colocamos una pajita para tomar, tratemos de conseguir una gruesa, pues de lo contrario no se termina mas.
Caro :)